Ocurrió junto al refugio de Linza
después de cenar migas de pastor
un par de huevos fritos con jamón
y una botella de vino en cuya etiqueta
se podía leer
“La vida es bonita
si así la ves.
Es corta,
si así la mides.
Es larga, si tus sueños
así lo son…”
Tras conversar con un montañero
sobre “Las Meditaciones” de Marco Aurelio,
con una cerveza en la mano
brindamos por él:
“Ave, Caesar”
Las montañas que vemos ésta noche
no son las que viste tú
los pinzones cuyo canto escuchamos
no son los que escuchaste tú
los caballos que vemos entre los árboles
no son los que montaste tú
en vez de espadas usamos bastones
y aunque no somos romanos
coincidimos estoicamente
con lo que escribiste tú
“Ave, Caesar, morituri te salutant”
Y bajo el tragaluz de la noche
—mientras Ilazki nos iluminaba
con la luz de los muertos—
bebimos un par de jarras más.
Lander Laborde
Verano 2010
Verano 2010
