Si yo fuera Presidente
no iría a vivir
a un palacio quisiera estar cerca de la gente
y vivir como la gente vive
Si yo fuera Presidente
abuelos y
abuelas no estaríais en la calle luchando por unas pensiones dignas
y por el futuro de vuestros hijos
tendríais lo suficiente
para no tener frío para no pasar hambre
y no habría más desahucios
ni asesinarían a más mujeres
si yo fuera Presidente
Si yo fuera Presidente
habría igualdad
de oportunidades entre hombres y mujeres
y no habría diferencias en salarios o en pensiones
educación y sanidad serían para todos
ya no habría listas de espera ni recortes
y los niños no estarían malnutridos
Si yo fuera Presidente
perseguiría la
corrupción el fraude y el tráfico de armas
nacionalizaría la banca y el transporte
derribaría los muros entre las personas
repartiría la riqueza de forma equitativa
los jueces harían Justicia
y los pobres —si los hubiere—
lo serían por vocación.
Si yo fuera presidente
reduciría los
sueldos a los políticos eliminaría sus privilegios
las naciones podrían decidir libremente
y habría democracia
si yo fuera Presidente
Pero con este programa tan humano
tan democrático y tan valiente
si —realmente— yo fuera Presidente
me matarían al día siguiente
con lo que mejor
me quedo como estoy.