A pesar de los derivados
que de mi nombre
hicieron los amigos
Landerete
Landelino
y otros
nadie que yo sepa
me puso un mote
Han tenido que pasar
más de 60 años
para que Sidi
—un crío saharaui de 3 años—
me ponga uno
ahora soy Nasrani
el que no reza
y en justa correspondencia
yo le adjudiqué otro
Egiati
el que dice la verdad.